La sedación consciente
¿Qué es la sedación consciente?
Es un tipo de anestesia ideal para quienes tienen adversión y miedo cuando acuden a la consulta, ya que no recuerdas el procedimiento o lo haces vagamente. Estarás relajado y sin molestias, pudiendo colaborar durante el procedimiento.
Una de las grandes ventajas es la mejor calidad del post operatorio, con menos dolor, muy controlado y una disminución importante del edema post quirúrgico, ya que se administran los medicamentos necesarios en el momento vía endovenosa.
Este procedimiento lo lleva a cabo un médico anestesiólogo, coordinado con el dentista para velar por tu bienestar y ofrecerte el mejor tratamiento.
El anestesiólogo, aparte de realizar la sedación consciente, asegura y regula las funciones vitales simples del paciente a lo largo de la cirugía, incluidas la respiración, la frecuencia cardíaca y la presión arterial.
Es un procedimiento innovador, hay pacientes que superan la fobia o el miedo a las intervenciones, y es también una ayuda para quien tiene falta de tiempo para ir al dentista.
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¿Para quién está recomendado la sedación consciente?
Todos los pacientes pueden beneficiarse de sus ventajas, está indicado para pacientes que tienen un nivel elevado de ansiedad a los procedimientos dentales o pacientes con niveles moderados de ansiedad, pero con cirugías prolongadas o de mayor complejidad (múltiples implantes).
También es una solución en pacientes con reflejo nauseoso importante, con síndrome de down, autismo u otras circunstancias que impliquen poca colaboración durante el tratamiento.
¿Cómo conseguimos el tratamiento sin dolor?
En la sedación consciente añadimos fármacos analgésicos y antiinflamatorios como el paracetamol y el dexketoprofeno que mejoran la calidad del post operatorio, con menos dolor o muy controlado y una disminución importante del edema post quirúrgico, al administrarse en el momento vía endovenosa. Más ventajas…
Con la sedación consciente se puede realizar más tratamiento en la misma sesión y por lo tanto en un menor número de citas.
Como el paciente está sedado y relajado, pierde la percepción del tiempo, con menos fatiga y menos dolor. Indicado para quienes quieren terminar cuanto antes, no tienen tiempo para asistir a muchas citas o ponen fecha final a su tratamiento.